Coín siempre ha destacado por la gran calidad de sus productos agroalimentarios, muchos de los cuales a día de hoy cuentan con el distintivo de la marca “Sabor a Málaga”.
Aún podemos encontrar panaderías donde el pan se amasa a puño y se hornea en leña, y molinos que muelen las distintas variedades de harinas de manera tradicional.
En repostería destacan los rosquetes de huevo, rosquillas de ochío; exclusivas de nuestro pueblo, y empanadillas de cabello de ángel. Estas delicias para el paladar se pueden encontrar durante todo el año en los distintos obradores de la localidad, aunque es típico su consumo en Semana Santa y Navidad.